Ya lo sabemos, el contenido es el rey, ¿verdad? Pero, ¿qué pasa cuando ese rey está cometiendo errores garrafales? Pues que en vez de reinar deja de ser tomado en serio y te hace perder tiempo, dinero y oportunidades.
Y no, no estoy hablando de errores ortográficos (aunque esos también duelen). Me refiero a esos errores estratégicos que pueden convertir tu creación de contenido en un agujero negro que absorbe tus recursos sin darte nada a cambio. Y si no tienes un plan, es como ir al supermercado sin lista: terminas comprando un montón de cosas que no necesitas y te olvidas de lo importante.
Así que es hora de, ¡ponerte las pilas! Vamos a enderezar ese contenido para que en vez de ser un dolor de cabeza, sea tu mejor aliado.
Error #1: No conocer a tu audiencia (el error del tiro al aire) Es como organizar una fiesta sin saber quiénes son tus invitados. ¿Vas a poner música electrónica para un grupo de salseros? ¡Claro que no! Lo mismo pasa con tu contenido. Si no sabes a quién le hablas, tus mensajes se perderán en el vacío.
Solución: Investiga a tu cliente ideal. ¿Qué le quita el sueño? ¿Qué le hace reír? ¿Qué palabras usa? Una vez que lo conozcas a fondo, podrás crear contenido que le hable directamente al corazón.
Error #2: Contenido aburrido (el error del bostezo)
¿Te has encontrado con esos artículos que parecen escritos por un robot? Sin personalidad, sin chispa, sin nada que te enganche. ¡Aburridísimos! Y lo peor es que abundan en internet. No caigas en esa trampa.
Solución: Dale sabor a tu contenido. Usa un lenguaje cercano, cuenta historias, comparte tus experiencias. No tengas miedo de mostrar tu personalidad. ¡La gente conecta con personas, no con robots!
Error #3: No tener un plan (el error del caos)
Crear contenido sin un plan de contenidos es como salir de viaje sin mapa. Puedes llegar a algún sitio, pero probablemente no será el que querías. Un plan de contenidos te ayuda a mantener el rumbo y a asegurarte de que cada pieza que creas tenga un propósito.
Solución: Define tus objetivos, elige los formatos que mejor se adapten a tu audiencia y crea un calendario editorial. Así tendrás una hoja de ruta que te guiará en tu camino hacia el éxito.
Error #4: No medir resultados (el error del avestruz)
Si no mides, no sabes qué funciona y qué no. Es como conducir con los ojos cerrados. Puedes tener suerte y llegar a tu destino, pero lo más probable es que termines en una zanja.
Solución: Utiliza herramientas de analítica para medir los resultados de tu contenido. ¿Qué publicaciones generan más tráfico? ¿Cuáles tienen más engagement? ¿Cuáles te ayudan a conseguir clientes? Estos datos te ayudarán a tomar decisiones informadas y a optimizar tu estrategia de contenidos.
Espero que este artículote haya ayudado a identificar esos errores de contenido que te están frenando y a encontrar soluciones para darles la vuelta. Recuerda, el contenido es una herramienta poderosa, pero solo si se usa de forma estratégica.